La nueva característica de Instagram que permite subir videos a la red ha tenido un impulso bastante fuerte: 5 millones de videos subidos durante las primeras 24 horas, seguramente gracias a mucha gente que descubrió que verse cool en videos es más dificil (y gratificante) que en una foto.
Pero sí Instagram ha tenido éxito con sus videos, en Vine la situación ha sido a la inversa. El pasado 20 de junio, y según las estadísticas de Topsy reportadas desde Marketing Land, se compartieron poco más de 1.5 millones de videos en Twitter, un descenso del 40% respecto al día anterior. Y durante la semana siguiente las cosas han seguido bajando en picada, llegando a 900.000 enlaces repartidos por Twitter.
El análisis es curioso (por decirlo de alguna forma), porque -contrario a lo que se pudiera pensar- realmente los enlaces a Instagram no han tenido un boom comparable a la caída de los mismos en Vine.
Enlace: http://www.fayerwayer.com/